ESPECIAL HALLOWEEN: SLEEPY HOLLOW, LA LEYENDA DEL JINETE SIN CABEZA

SLEEPY HOLLOW (1999)

Director: Tim Burton

Calificación: 8.3

Bienvenidos a una nueva entrega en el Especial Halloween donde hablaré de la adaptación libre del cuento homónimo escrito por Washington Irving, de la bizarra imaginación de Tim Burton, con ustedes: Sleepy Hollow.

Ichabod Crane es un criminalista poco ortodoxo que busca usar técnicas científicas para resolver los crímenes de manera más efectiva. Sus métodos son puestos a prueba cuando le es asignado un caso de homicidios en el pueblo de Sleepy Hollow donde un misterioso jinete decapita a sus víctimas, Crane descubrirá un secreto que pondrá en peligro a toda la población y el misterio del jinete que está relacionado con el oscuro pasado del pueblo.

Si hay un director que sabe como hacer una película para Halloween es Tim Burton. Su estilo visual es tan característico que no importa si no conozcas su filmografía, al ver por lo menos una escena ya sabes que es de él. Sleepy Hollow es una de mis cintas favoritas de Burton y una de las mejores colaboraciones que hizo con Johnny Depp. Esta cinta se hizo en una época donde los viejos personajes de terror eran revitalizados para una nueva audiencia, comenzando con la genial Drácula de Bram Stoker dirigida por Coppola, la decepcionante Frankenstein de Mary Shelley dirigida por Kenneth Brannagh y finalmente Sleepy Hollow de Washington Irving dirigida por Burton.

Vamos con el elenco, Johnny Depp estaba en su mejor época actoral, aún no era una estrella taquillera pero estaba dando pasos para hacerlo. Aunque sus colaboraciones con Burton lograron sacar su sabor excéntrico que nos atrajo a muchos espectadores, cabe destacarse que cada rol se sentía distinto. Ichabod Crane es un tipo muy inteligente, pero un poco cobarde, me agradó mucho que le dieran un arco argumental muy adecuado donde tenemos a un ateo que debe enfrentar una fuerza posiblemente sobrenatural, Depp logra mostrarnos ese tipo de héroe introvertido que al final tiene un corazón de oro. Christina Ricci encarna a Katrina Van Tassel y aunque ella es muy bella y hace un trabajo decente, nunca me vendió ese romance con el personaje de Depp. Es curioso ver a tantos futuros actores de la saga Harry Potter como Michael Gambon, Richard Griffiths y Miranda Richardson. También podemos apreciar apariciones especiales de Michael Gough (el Alfred Pennyworth de la era Burton-Schumacher), Christopher Walken, Martin Landau e incluso Christopher Lee. Y cómo no olvidar a Ian McDiarmid que parece el Conde Olaf aquí y que estuvo haciendo sus escenas como Palpatine en la Amenaza Fantasma casi al mismo tiempo de esta cinta.

Como todas las cintas de Burton, esta es visualmente rica desde su fotografía gracias al manejo de luces y colores de Emmanuel Lubezki, el diseño de producción de Rick Heinrichs que convierte a este pueblo en algo salido de un cuento de hadas y los vestuarios de Colleen Atwood que dan características únicas a los personajes. El diseño de Sleepy Hollow hace eco al cine de terror producido por los Estudios Hammer que fue muy popular en los años 50 y le brindó fama a los actores Peter Cushing y Christopher Lee. Las películas de Hammer eran reconocidas por sus adaptaciones bastante góticas y llenas de violencia, en esta época no se toman tan en serio llegando a considerarse exageradas, pero en aquella década, era algo bastante horripilante.

Y precisamente de ese punto quiero hablar, para muchos Sleepy Hollow tiene problemas de tono, ya que en unos momentos tenemos sutilezas y actuaciones bastante teatrales, pero en otros hay demasiado gore. El estilo narrativo e interpretativo no va a concordar con un estilo moderno donde o queremos ver mucho o preferimos dejarlo a la imaginación. Es muy obvio que Burton hizo esta cinta como homenaje al cine de terror de Hammer de los 50 que probablemente habría visto de niño. Aunque en muchas ocasiones los sets y los efectos no se vean tan reales, esa es precisamente la intención, por eso esta y Dracula de Bram Stoker logran funcionar. No tiene que verse real, sólo tiene que verse efectivo.

El mayor problema de Sleepy Hollow es la historia, generalmente las cintas de misterio tienen tramas ultra complicadas que no sólo es la tarea del héroe sino también del público el de descifrarlas. Hay muchas como El Tercer Hombre o las películas de Hannibal Lecter donde los elementos se resuelven y se siente el encaje, pero hay otras cintas donde los detalles no siempre concuerdan. En Sleepy Hollow se enreda aún más la historia y cuando llegamos a la gran revelación, no termina siendo tan convincente, llegando a decaer la calidad actoral especialmente del antagonista sorpresa. 

Habiendo dicho esto y a pesar de las inconsistencias en el guión, Sleepy Hollow es una película que no parece de 1999, han pasado casi 20 años desde su estreno y déjeme decirles que ha envejecido bien. Y antes de terminar esta reseña debo destacar la música de Danny Elfman que estaba en su máximo poder en aquella época, cualquier composición era oro puro y nos ayudaba a adentrarnos en esos mundos imaginarios. Una de los mejores soundtracks de la dupla Burton-Elfman junto a Edward Scissorhands, Batman Regresa y El Gran Pez.

Esta fue mi reseña de Sleepy Hollow, mañana hablaré de Spawn La Serie Animada y el jueves una nueva entrega en el Baúl Podrido donde hablaré de El Barco Fantasma. Si les gustó esto, comenten y compartan, este blog no es sólo mio, es de ustedes.