DOMINGO DE CLÁSICOS: CONTACTO SANGRIENTO

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CONTACTO SANGRIENTO (1988)

Director: Newt Arnold
Calificación: 7.3

Bienvenidos a un nuevo Domingo de Clásicos donde hablaré de la cinta Contacto Sangriento, protagonizada por Los Músculos de Bruselas: Jean Claude Van Damme, la cual le dio el estrellato y le abriría paso a una exitosa carrera a finales de los 80 y comienzos de los 90.

Contacto Sangriento es una película que está basada en la supuesta vida de Frank Dux, un artista marcial norteamericano que afirma haber participado en un torneo clandestino y milenario en Hong Kong conocido como el Kumite, siendo el primer occidental en ganarlo. Años después se descubrió que todo era una farsa por parte de Dux y que nunca hubo registros de tal torneo o incluso de sus títulos como artista marcial, sin embargo el guionista Sheldo Lettich aprovechó estos cuentos y forjó el guión para esta cinta.

Recuerdo que veía esta película con mi papá cada vez que la transmitían por TV, mi cuñado tenía una copia en VHS de Contacto Sangriento y siempre me impresionaba la agilidad de Van Damme a pesar de su imponente masa muscular. 

Vamos con el elenco, Jean Claude Van Damme no es que sea un gran actor, pero no vemos sus películas por sus dotes actorales sino por sus habilidades atléticas, es irónico que el artista marcial farsante Frank Dux halla sido interpretado por uno verdadero y somos testigos de eso cuando nuestro héroe pelea. Cómo no olvidar los splits, los puños y la famosa patada de helicóptero que Van Damme usaría en todas sus películas para acabar con los malos. Esta fue la primera colaboración de Bolo Yeung con Van Damme, que años después volverían a enfrentarse en Doble Impacto, fue uno de los primeros villanos que me dio miedo, y sus peleas son de las mejores en la película. Aquí también podemos apreciar a Forest Whitaker en uno de sus primeros roles, wow, cómo se pasa el tiempo.

Esta cinta tiene todos los clichés en el género: Un flashback mostrando el entrenamiento del héroe con su maestro, el héroe siendo mejor que el resto de los peleadores, un amigo del héroe malherido, un objeto sexual sin profundidad de personaje y una batalla final donde el villano hace trampa y el héroe recuerda su entrenamiento para poder vencerlo. ¿Y saben qué? No interesa. Así era el cine de acción de los 80, para muchos críticos estos elementos bajaban la calidad de los filmes y varios de los que se consideran hoy clásicos fueron tratados como basura en el año de estreno, así que estas películas se hacían porque había un público que quería entretenerse, no existía la Internet tan accesible, ni los puntajes de Rotten Tomatoes, la gente no se avergonzaba de ver películas que en esta década serían catalogadas como vergonzosas.  Jean Claude Van Damme, al igual que el viejo Arnold, tiene un acento bastante pronunciado y demasiado francés para ser un militar estadounidense, pero la película al menos tiene la intención de no ser tan tomada en serio, así que no hay problema.

Contacto Sangriento no es una película perfecta, pero al menos tiene secuencias muy bien hechas, como el entrenamiento de Dux con su maestro Tanaka, el cual le enseña el código de honor de los Samurai y a canalizar sus sentidos sin usar sus ojos, las peleas que están bien coreografeadas en aquella época cuando Hollywood permitía disfrutar a su público de la acción sin necesidad de explosiones o CGI que irónicamente era considerado poco profesional en aquel entonces. Obviamente la música tiene todo ese glorioso sintetizador ochentero, con dos canciones del legendario Stan Bush que fueron Fight to Survive y Don´t Steal the Night que subían la adrenalina y nos hacía sentir más optimistas.

Tal vez las nuevas generaciones no entiendan lo cool de esta película, pero los que logramos encontrar esta cinta en los últimos años del VHS tuvimos la fortuna de ser introducidos a un artista marcial que probó que los asiáticos no son los únicos que saben patear traseros de manera elegante. Van Damme fue disfrutado por los hombres gracias a sus habilidades de pelea y por las mujeres gracias su físico y buen parecido, y si tienes de casualidad una hermana que haya nacido a finales de los 70 o a comienzos de los 80, probablemente haya tenido a Van Damme como su amor platónico.

Así que queridos lectores, si se sienten nostálgicos el día de hoy les recomiendo que vuelvan a ver esta película, al menos por la acción y los que no la han visto los dejaré forjar su propio criterio, aunque no se debe negar que estarán entretenidos por la cursilería ochentera e impresionados por las patadas de Van Damme.

Este fue el Domingo de Clásicos de esta semana, la próxima estaré hablando de Dragon Ball y Dragon Ball Z, si les gustó esto comenten y compartan, este blog no es sólo mio, es de ustedes. Y obviamente los voy a dejar con Fight to Survive, linda semana.


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